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Cultura del Caribe Mexicano
El Caribe Mexicano es un destino con una gran riqueza cultural e histórica. Se sabe que Quintana Roo fue una zona poblada por los mayas; sin embargo, también fue un territorio por el que pasaron españoles y piratas provenientes de diferentes partes del Viejo Mundo, los cuales venían a nuestras costas en busca de tesoros o para utilizarlas como escondite.
La historia de los piratas en Quintana Roo comienza a partir del siglo XVI, cuando los continuos conflictos entre las potencias marítimas europeas se trasladaron hacia el Nuevo Mundo, dando inicio a la práctica de la piratería, patrocinados inicialmente por monarcas y compañías particulares que estaban en contra de los intereses de la Corona Española e Inglesa, para después constituir grupos independientes que estuvieron acechando durante tres siglos las costas y embarcaciones marítimas del mar Caribe.
Recordando nuestro pasado: un sitio cotizado por los piratas
Con más de 480 años de historia, Isla Mujeres es un sitio de gran tradición y cultura caribeña. Su historia comienza en tiempos de los mayas cuando la isla era únicamente un santuario de gran prestigio que formaba parte de la provincia maya de Ekab y que estaba consagrada a Ixchel, diosa maya de la luna, el amor y la fertilidad, la cual recibía ofrendas que los creyentes depositaban en sus playas. Las mujeres mayas debían dejar las ofrendas y hacer un peregrinaje a la isla como parte de su paso de niña a mujer. La isla se mantuvo como santuario hasta 1517 cuando el español Francisco Hernández de Córdoba llegó a la isla y, al encontrarse con varias figurillas en forma de mujer, decide darle el nombre de Isla de Mujeres, que con el tiempo fue adaptado a como se le conoce actualmente, Isla Mujeres.
En 1850 se funda el pueblo de Dolores en Isla Mujeres, donde se establecen más de 250 pescadores, piratas y mayas que habían huido de la Guerra de Castas. Debido a su posición geográfica, Isla Mujeres, como muchas islas del Caribe, se convirtió en refugio y hogar de corsarios, contrabandistas y tratantes de esclavos, siendo uno de los más conocidos fue Fermín Mundaca, que se instaló en la isla a principios del siglo XIX, cuando la armada Británica comenzó a perseguir a los esclavistas. Ahí construyó la hermosa Hacienda Mundaca, con la intención de convencer así a una linda isleña conocida como "La Trigueña" de casarse con él, cosa que jamás logró.
Durante los siglos XVIII y XIX la encantadora isla de Holbox fue asediada por varios piratas entre los que destacan el capitán Lafitte, Francis Drake y Francisco de Molas, quien la usó como refugio por muchos años. Originario de Cataluña, de Molas era un funcionario de aduana en Yucatán y el encargado de recibir mercancías y administrar los fondos destinados a reconstruir Yalahau, que era el puerto de Holbox, hasta que un día se le acusó por robo de fondos, tráfico de esclavos y mercancías y por conducir negocios con corsarios famosos, como los hermanos Lafitte, razón por lo que fue capturado y llevado a una cárcel de Mérida de la cual escapó para dirigirse a Cozumel, donde ahora hay un sitio que lleva su nombre: Punta Molas.
Por su parte Cozumel era un territorio controlado por Jean Lafitte y su hermano, quienes se dedicaban al comercio de esclavos y tenían numerosos refugios y partidarios en la isla. Otro de los piratas que se estableció en Cozumel fue el galés Sir Henry Morgan, quien al llegar a la isla quedó totalmente enamorado con sus caletas, cuevas y vestigios mayas, que fueron los sitios perfectos para esconder sus tesoros.
Al sur del Caribe Mexicano, Bacalar fue uno de los sitios más cotizados por los piratas provenientes de Inglaterra, Francia y Holanda, que venían en busca de palo de tinte, razón por la que los españoles decidieron erigir el Fuerte de San Felipe, sitio que hoy en día alberga el Museo de la Piratería, el cual exhibe una importante colección de armas, mapas, embarcaciones a escala y piezas históricas que concentran toda la historia de Bacalar y su relación con los piratas.
Visita el Caribe Mexicano y descubre por tu cuenta qué es lo que hizo que los piratas se enamoraran de este destino.