Hospedarse en el centro de las ciudades del Caribe mexicano, significa vivir lo opuesto a lo que sería quedarse en cualquier otra ciudad metropolitana del mundo. Aquí no habrá rascacielos ni calles congestionadas; habrá calles peatonales, bares vibrantes, boutiques locales y mercados llenos de artesanías. Los hoteles del centro son una excelente opción para aquellos viajeros que se interesan por la cultura local y quieren conocer realmente la personalidad única del destino. La belleza de quedarse en el centro está en que, desde el momento en que dejas el lobby, encontrarás todo lo que necesitas, justo a la salida del hotel.
Para una estancia más animada, la alternativa es un hotel en el centro de Cancún, ahí podrás elegir tu vida nocturna. Cancún es una de las zonas turísticas más grandes de México. Recibe anualmente a cerca de 25 millones de visitantes; desde la década de los 70, atrae a turistas, tanto a las playas dignas de fotografía como a los sitios arqueológicos cercanos, como Tulum. Para una experiencia de lugareño, el centro es el lugar indicado. En auto, es un viaje de diez minutos a la zona hotelera. El centro de Cancún ofrece su sabor local en un ambiente más asequible. En esta zona podrás disfrutar de todos los restaurantes, bares y mercados que la ciudad ofrece.
Los hoteles del centro de Tulum se ubican en la zona conocida como “El Pueblo”, son opciones distintas que en la zona hotelera. En “El Pueblo”, los viajeros encontrarán una mezcla de hoteles de gama media y económicos, en medio de restaurantes mexicanos auténticos, tiendas locales y puestos de smoothies para energizar la mañana.
Al sur del Caribe Mexicano se encuentra Chetumal, donde hay numerosos hoteles en el centro, a unos pasos de Boulevard Bahía. Conocerás monumentos y esculturas que no querrás perderte.
Así mismo, encontrarás todo tipo de puestos de comida para probar la comida local; las favoritas son las “marquesitas” (crepa crujiente rellena de queso derretido y el relleno dulce de tu elección).
Alguna vez, Playa del Carmen fue un pequeño pueblo pesquero; hoy, cuenta con un centro que ofrece a los visitantes algunas de las mismas atracciones que Cancún, pero sin perder el toque de un pueblito. Ponte tus chanclas y camina por las tiendas y galerías de la Quinta Avenida; también encontrarás restaurantes dirigidos por algunos de los mejores chefs de México. De hecho, los hoteles del centro tienen una de las mejores áreas restauranteras (otra ventaja de hospedarse aquí). Aunque existen algunas opciones de todo incluido, la mayoría de los hoteles son más pequeños (50 habitaciones o menos), desde hoteles boutique con terrazas increíbles hasta suites lujosas con vistas al mar.
Las parejas, los viajeros solitarios o los grupos de amigos que prefieren un lugar más rústico, sereno y pacífico, deberán conocer un destino como Puerto Morelos. Caminando, podrán encontrar opciones fantásticas para comer, cafés, clubs de playa, tiendas de recuerdos y la plaza principal. Holbox, una isla de 40 kilómetros libre de autos, da una mayor sensación de náufrago y es uno de los pocos lugares del planeta donde es posible nadar junto a tiburones ballena. Holbox se localiza dentro de una reserva natural así que sus hoteles mantienen la experiencia de una isla pequeña, cuentan con pocas habitaciones y un diseño fascinante.
Sin importar el centro que prefieras, el Caribe mexicano te espera.